Escribo desde lo que soy. Desde lo que me pasa, desde el pasado, desde el futuro que invento.
Escribo porque quiero, porque lo necesito, para que me lean, para leerme y reinterpretarme.
Escribo. No para que algo sea lindo, guste, venda o tenga valor.
Escribo para verme, reflejarme. Porque el espejo es muy superficial. Porque escribiendo saco mas de mi. Me veo mas profundo y porque las palabras van mas rápido que mis miedos.
Escribo. Porque a veces decir, no puedo. Porque las palabras no me salen. Se atragantan. Escribo porque no hay nada que limite mis dedos. Porque la conexion es mas directa con el corazon y porque escribiendo no me corrijo.
Escribo porque en lo desprolijo y sinsentido de lo que escribo, me encuentro. Porque al perderme en puntuaciones encuentro un punto y aparte.
Escribo porque lo que escribo, lo dejo. Porque es mi forma de soltar. Escribo porque suelto, pero tambien porque lo que sentí merece ser eterno.
Escribo, y me leo.
23 julio, 2016 10:51
A mí también me pasa lo mismo. Soy lector del escritor que he sido apenas cinco minutos o cinco años si releo un diario antiguo que alguien que dice ser "yo" escribió. Como decía Gabriel García Marquez, según alguien me contó, cuando alguno de sus hijos le releía párrafos de sus obras para mantener fresaca la memoria, "¿y eso escribía yo?; estaría borracho," León Felipe llamaba a las palabras que se atragantan "el grito de estopa". No estás sola; somos bastantes los que hacemos uso de la pluma para mantenernos en pie.
23 julio, 2016 12:36
Muchas gracias por tus palabras, hace mucho no escribia y es lindo ver tu comentario. Te mando un abrazo!