Yo no podía creerlo, simplemente no me parecía real.
Ponía en duda tus sentimientos,
No creía lo que decías, lo que hacías.
Una especie de negación inevitable se apoderaba de mis sentimientos,
impulsada por la razón, por pensar que no podía ser de ese modo.
Te puse en duda, me puse en duda.
Dudé de todo lo que me rodeaba.
Me di cuenta que aquella roca firme,
como una gota fui agujereandola de a poco.
Aquel suelo que supo sostenerme al caminar, lo convertí en un colchón de agua.
Se volvió muy difícil dar pasos.
Ahora a la distancia, supiste soportar mis temores.
Supiste ayudarme a superarlos.
Y hoy solo me queda por decir:
Mi amor, fui una tonta
Eme. :)
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